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Aunque pensar en el futuro no siempre es reconfortante ni esperanzador, tampoco tendría por qué ser sinónimo de predicciones apocalípticas y catástrofes. En esta ocasión, un autor juega de Nostradamus y se imagina el estado del mundo que heredarán sus nietos: ancianos felices, jugueteando sobre jardines que antes eran minas de carbón, pero que nunca alcanzarán la cada vez más avanzada edad de jubilación.
POR Andrés Hoyos
ACERCA DEL AUTOR
Escritor, columnista y fundador de la revista El Malpensante. Es autor de Conviene a los felices permanecer en casa, Vera y Los hijos de la fiesta, entre otros libros. A finales de 2022, el sello editorial Seix Barral publicó La tía Lola, su más reciente novela.