Es la crítica de danza de The New Yorker.
Desde tiempos inmemoriales el guayabo ha acechado los despertares de la humanidad. Este sobrio perfil dibuja los muchos rostros y nombres de esa deuda insaldable y universal. [...].
Publicado en la edición
No. 205Puede que su relación de amor con el reguetón y otros ritmos, que asusta a los folcloristas más tradicionales, sea lo que mantenga vivo el vallenato y evite que se ahogue en el fo [...]
Publicado en la edición
No. 216Contenido patrocinado. Redacción: Fundación El Malpensante. [...]