El equipo de fútbol de Elton John

Para salvar a un equipo de tercera, y de paso la maltrecha relación con un padre ausente, el cantante compró el Watford FC. En poco tiempo, lo llevó a disputar una final de la prestigiosa FA Cup e incluso a pisar por primera vez la máxima categoría del fútbol inglés, en la que hoy se bate por no descender.

POR Martín Franco Vélez

Enero 27 2021

Elton John es nombrado vicepresidente del Watford FC y hace un entrenamiento de exhibicio?n en el estadio del equipo (noviembre de 1973). © Charles Ley.

 

La tarde del 28 de febrero de 2020, cuando la amenaza del coronavirus apenas despuntaba en el horizonte, el todopoderoso Liverpool FC –seis veces campeón de Europa, y el tercer equipo del continente con más copas ganadas– llegó al estadio de Vicarage Road, en Watford, una ciudad ubicada a poco más de veinte kilómetros de Londres, para seguir consolidando una gesta que estaba a punto de convertirse en épica: coronarse campeón de la Premier League sin perder un solo partido, algo que solo había logrado el Arsenal de Arsène Wenger en la temporada 2003-2004.

Cualquier fanático del fútbol en Inglaterra intuía que ese sería un partido de trámite; parecía imposible que un modesto equipo ubicado en el penúltimo lugar de la tabla pudiera hacer algo contra esa máquina de Jürgen Klopp, que completaba 44 partidos sin perder y había caído derrotado por última vez el 3 de enero de 2019. Pero sucedió: sin un fútbol vistoso, y gracias a una defensa férrea, el Watford logró imponerse 3-0 y arruinar el récord que “los Reds” estaban a punto de alcanzar.

Y aunque es cierto que a pesar de la victoria el Watford continúa luchando para no descender a segunda división (o continuaba, antes de que esta pandemia pusiera en pausa todas las ligas alrededor del mundo), también lo es que su historia no siempre ha estado marcada por el fracaso. A comienzos de los años ochenta, el equipo tuvo un ascenso fulgurante cuando pasó de tercera división a primera, logro en el que tuvo mucho que ver una figura legendaria: el cantante británico Elton John. Pero, ¿cuál es la relación de Elton con el equipo? Todo empieza, aunque suene extraño, gracias a la pésima relación del artista con su padre.

 

Fanático superestrella

Reginald Kenneth Dwight –conocido popularmente como Elton John– era todavía un niño cuando su padre, un militar adusto y férreo, lo llevaba de la mano a una de las tribunas del Vicarage Road, en Watford, conocida como “the Bend”. Elton ha contado muchas veces los vaivenes de la oscura relación que tuvo con su papá (en Rocketman, su película biográfica, quedó bien retratada), quien nunca vio con buenos ojos sus inclinaciones artísticas y abandonó la casa cuando él era todavía un niño para formar otra familia, así que esas visitas al estadio eran los únicos momentos en los que el pequeño Reginald podía acercarse un poco a su papá. Y el Watford FC, la mejor excusa.

Aunque con los años la relación se volvía cada vez más lejana, el amor por el Watford le quedó a Elton en la sangre. En 1974, ya famoso y millonario gracias a éxitos como “Your Song” o “Goodbye Yellow Brick Road”, un periodista le contó que el equipo estaba en serias dificultades económicas. Preocupado, Elton los contactó, ofreciéndoles tocar un concierto en el estadio para recaudar fondos; a cambio, le dieron acciones en el club y la posibilidad de ser vicepresidente. En su autobiografía, titulada Yo, Elton John, describe así el momento: “Para el concierto me vestí con un disfraz de abeja –era lo más cercano que pude encontrar a la mascota del club, un avispón de dibujos animados llamado Harry–, y me traje a Rod Stewart para que cantara conmigo. Cuando menos, todo eso le proporcionó a Rod una tarde de risas constantes a costa del césped terrible del campo del Watford”.

 

Rod Stewart y Elton John entrenando en el Vicarage Road (noviembre de 1973). © Michael Putlan.

 

 

Como cohetes

Dos años más tarde, el presidente del equipo, Jim Bonser, le ofreció a Elton venderle el Watford. A pesar de los ruegos de su representante, que estaba seguro de que sostener un club de tercera división abriría un hueco insalvable en las finanzas del artista, Elton decidió comprarlo. ¿Qué podía salir mal?

En 1977 convenció al exfutbolista Graham Taylor, quien había logrado ascender al Lincoln City y más tarde sería entrenador de la selección inglesa, de que se incorporara como entrenador. Y fue un éxito: Taylor inició una buena racha que el equipo nunca había visto al contratar nuevos jugadores, revolucionar la táctica de juego y ampliar el estadio (todo bajo el patrocinio monetario de Elton, quien, emocionado, se compró un Aston Martin al que llamó “el coche del presidente”, lo hizo pintar con los colores del club y lo usó para asistir, sin falta, a todos los partidos). Apenas dos temporadas después, el Watford ascendió a segunda división; en 1981 alcanzó la primera división por primera vez en su historia, y al año siguiente logró ser subcampeón de la liga. En 1984 el equipo llegó a la final de la FA Cup, uno de los torneos más antiguos y prestigiosos del fútbol inglés, y aunque perdió 2-0 frente al Everton, las cámaras de la BBC filmaron a Elton llorando como un niño emocionado.

Después de eso, la marea del éxito empezó a bajar. Taylor se fue a dirigir al Aston Villa y Elton no logró hacer que el equipo volviera a conseguir resultados similares. En 1987 le vendió el Watford a Jack Petchey –“un multimillonario que había hecho su fortuna con los coches”– y se desentendió del club, hasta que siete años después volvió a adquirir una cantidad considerable de acciones, fue presidente otra vez y reincorporó a Taylor en sus filas. Pero no fue lo mismo: el equipo ya estaba en segunda división y ni siquiera el entrenador que alguna vez le dio tanto éxito logró hacerlo subir otra vez. En 2002, Elton y Taylor abandonaron el equipo, esta vez para siempre, pero siguieron manteniendo una amistad cercana hasta 2017, cuando Taylor murió.

 

Durante el concierto al aire libre para recaudar fondos en favor del Watford FC (mayo de 1974). 

© Anwar Hussein

 

En el nombre del padre

Podría ser el final de la historia, pero hay más: un último episodio, trágico como un penal en el último minuto que falla la estrella del equipo. Pocos años antes de vender el Watford, Elton regresó a Inglaterra luego de una gira por Sudáfrica y se enteró de que su padre estaba muy delicado de salud: tenía un grave problema cardíaco y debía someterse a un bypass cuádruple. Lo llamó y se ofreció a pagarle la cirugía en un hospital privado sin importar lo que costara, pero su padre se negó de tajo. Le propuso entonces lo único que podía volver a unirlos en esa etapa final: regresar juntos al fútbol. Su padre aceptó.

Esa misma tarde ambos fueron a ver al Watford contra –vaya casualidad– el Liverpool. Antes del partido comieron en un restaurante y hablaron, como cada que lograban verse, de cosas banales. Luego fueron al estadio. Elton confiesa que, a pesar de la enfermedad y de saber que su padre estaba grave, seguía molesto por la manera como lo había tratado todos esos años y esperaba que en esa oportunidad, quizás la última, lograran cambiar las cosas. Aunque deseaba que a su padre le impresionara verlo como presidente del equipo de sus amores, y que sus seguidores cantaran una barra coreando su nombre, él permaneció impasible en la tribuna. No dijo nada, ni siquiera cuando el Watford cayó 3-1. “Si por mi música nunca me había caído un ‘enhorabuena, hijo, me siento orgulloso de ti’, tal vez lo consiguiera por mis logros con el Watford. Pero no fue así”, escribe Elton.

Se despidieron de manera cordial al salir del estadio. Nunca más volvieron a verse.

 

El cantante hace una mueca por detrás del técnico Graham Taylor, quien para entonces había terminado su primera etapa en el Watford FC y estaba dirigiendo la selección inglesa de fútbol (abril de 1991). © Mirrorpix

 






ACERCA DEL AUTOR


Martín Franco Vélez

Periodista y editor. En agosto, editorial Planeta publicará su primer libro, titulado "La sombra de mi padre".